Cuando el 6 de noviembre de 1989 Phil Collins lanzó su cuarto álbum solista, “…But Seriously”, hizo un buen uso de la brecha de cinco años que había transcurrido desde “No Jacket Required”.

No es que no estuviera ocupado: había estado trabajando con Genesis, Eric Clapton y en la película “Buster”. Pero Collins tuvo tiempo de pensar en lo que iba a decir cuando finalmente se presentara la oportunidad.

El título estuvo bien elegido: si bien sus álbumes anteriores a menudo tenían miradas irreverentes, el nuevo LP encontró a Collins explorando problemas desde una perspectiva más directa. “Siento que estoy pisando nuevos caminos, escribiendo sobre cosas que he sentido durante mucho tiempo pero sobre las que nunca he escrito realmente”, dijo en una entrevista.

Por ejemplo, “That’s Just the Way It Is” aborda la situación política en Irlanda del Norte en aquel momento, que seguía viéndose en los noticieros de todo el mundo producto de los atentados terroristas. “La gente está creciendo allí, los niños están creciendo, y ves noticieros en los que están lanzando bombas molotov y ese tipo de cosas, y realmente no saben por qué lo están haciendo”, dijo Collins. “Simplemente lo están haciendo porque sus hermanos lo hicieron y sus padres lo hicieron y sus abuelos lo hicieron”.

Otra canción, “I Wish It Would Rain Down”, explicó, trataba sobre encontrar el primer amor años después de haberse separado de él. “Y abre todos esos sentimientos nuevamente”, señaló. “Un psicólogo probablemente miraría debajo de eso y diría que se relaciona con mis relaciones pasadas”.

Collins explicó que muchas de las letras terminaron en el álbum tal como las improvisó mientras elaboraba las canciones. Al aceptar que algunos consideraban su enfoque como “simplista”, respondió que esa es la “forma en que escribo canciones, desde el punto de vista del hombre de la calle. No necesita conocer los detalles, todo lo que necesita saber son los hechos”.

Junto con un cambio en la temática, Collins también empleó un cambio de enfoque en el armado. “Quería entrar en la grabación sabiendo sobre qué cosas iba a estar cantando”, dijo en una entrevista. “Hicimos las voces a lo largo de todo el álbum en lugar de hacerlas todas al final. Por lo general, después de un par de semanas escribo todas las letras y luego vuelvo y las canto a todas. Esta vez simplemente intercalamos todo el asunto. Así que es un álbum muy agradable de esa manera”.

Al igual que en sus discos anteriores, Collins empleó una amplia gama de conocidos músicos de sesión para el LP, pero los invitados más notables fueron Eric Clapton, que tocó en “I Wish It Would Rain Down”, y David Crosby, que proporcionó la voz para “That’s Just the Way It Is” y “Another Day in Paradise”.

“Clapton tocó en (mi álbum de 1981) ‘Face Value’, pero tocó muy, muy silenciosamente en ‘If Leaving Me Is Easy’, y todos dijeron que no podían escucharlo, y se quejó de que nunca le pedí que tocara en ningún otro disco”, recordó Collins. “Así que le pedí que tocara en este, y lo hace muy bien”.

Destacó que trató de contar con Crosby en “Face Value”, pero por esos días estaba navegando. “Cuando lo invité para este disco, le dije que quería que entrara y eligiera todas estas armonías extrañas: y eligió letras raras en las que la gente de otra manera no pensaría. Una asociación muy exitosa”.

Si Collins se sintió confiado sobre el resultado del álbum, tenía buenas razones para hacerlo. “…But Seriously” se convirtió en el segundo álbum más vendido de la temporada 1989-1990, y también fue el último álbum número uno en los Estados Unidos de los 80 y el primero de los be 90, siendo certificado cuatro veces platino. El primer single, “Another Day in Paradise”, fue el último de los siete número uno de Collins en los Estados Unidos, mientras que “I Wish It Would Rain Down” alcanzó el número 3, “Something Happened on the Way to Heaven” y “Do You Remember?” llegaron al puesto 4 y “Hang in Long Enough” alcanzó el número 23.

El LP fue nominado para cuatro premios Grammy y ganó el galardón a la Grabación del Año por “Another Day in Paradise”. También se alzó con un Brit Award omo Mejor Single Británico del Año. Era la segunda canción que componía sobre los homeless, después del tema de Genesis “Man on the Corner”, de 1981. Se inspiró en una visita a Washington, DC, donde había visto el contraste entre las personas que vivían en la calle y los dignatarios de la política estadounidense que se dedicaban a sus asuntos.

El mensaje se hizo aún más duro para él. “El día que corté el disco, estaba saliendo de la sala en Londres, (el productor) Hugh Padgham y yo”, recordó. “Estábamos caminando hacia mi auto, y una señora estaba sentada al lado de la calle con dos niños. Me dijo: ‘Préstanos un poco de dinero’, y me congelé, ya sabés, casi fingí que no lo escuché, al igual que todos los demás… Y mientras seguía caminando, pensé: ‘Sigo caminando y ella me acaba de pedir dinero. Tiene dos hijos y no tiene dinero; tal vez ella no tiene un hogar, ¿quién sabe?’. Y aquí estoy, y acabo de terminar de cortar el disco, así que lo escuché una docena de veces y… es aterrador. La gente como yo, y creo que todos somos iguales, tenemos que hacer algo “.

Con el trabajo terminado, Collins describió “…But Seriously” como “el álbum más sólido que he hecho desde ‘Face Value’” y dijo que era importante cambiar de rumbo debido a sus trabajos más recientes: los singles “A Groovy Kind of Love” y “Two Hearts”, de la banda sonora de “Buster”, podrían mostrar como que se había “ablandado”.

“Hice ‘Buster’ porque me encantó la historia, me encantó el guion y quería actuar”, explicó. “Fue un gran vehículo para mí, pero era un vehículo de los años 60… no era lo que haría Phil Collins como solista necesariamente. Pero siento que la gente no ve eso, solo ve otro single de Phil Collins. Entonces, realmente, en este álbum intenté llevar a la gente a donde realmente estoy, que es un baterista / cantante / compositor capaz de escribir canciones, creo, canciones muy conmovedoras. Mis mejores canciones en un largo tiempo están en este álbum”.