El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, rechazó hoy las críticas al acuerdo de cooperación firmado con el gobierno de Libia reconocido por la ONU e insistió en el derecho de su país a ofrecer ayuda militar a Trípoli.
“Tenemos todo el derecho de cooperar y trabajar juntos”, afirmó Erdogan en un discurso televisado y agregó que, de ser necesario, Turquía ampliará “la dimensión militar del acuerdo (con Libia)” y evaluará “todas sus posibilidades por mar, tierra y aire”, informó la agencia de noticias EFE.
Turquía y el gobierno del Acuerdo Nacional libio (GNA), con sede en Trípoli y reconocido por la ONU, firmaron el 27 de noviembre un acuerdo que delimita las zonas de interés económico.
El acuerdo firmado por Erdogan y Fayer al Serraj, el presidente del GNA, abre la posibilidad de que Ankara le suministre ayuda militar en el conflicto armado contra el mariscal Jalifa Hafter, que desde Tobruk controla gran parte del país y es apoyado por Rusia, Francia, Egipto y Arabia Saudita.
Ayer, el parlamento turco ratificó la parte militar de ese acuerdo, que prevé asistencia militar si Trípoli la solicita.
Además, el acuerdo con Libia fija la frontera entre sus zonas económicas exclusivas en una distancia de cien kilómetros del sur de la isla griega de Creta, algo que tiene implicaciones en la búsqueda y extracción de hidrocarburos.
Al mismo tiempo, Turquía también mantiene un conflicto con Chipre, socio de la Unión Europea, por la búsqueda de hidrocarburos en el mar.
Por su parte, Grecia rechazó el controvertido memorando de entendimiento sobre delimitación de fronteras marítimas en el Mediterráneo y aseguró que el acuerdo firmado entre Fayer al Serraj y Erdogan, “no vale ni siquiera la tinta con la que fue escrito”.
Para Atenas, el acuerdo es una “violación del derecho marítimo internacional y los derechos soberanos de Grecia y otros países”.
“Sabemos muy bien la dimensión del apoyo turco a las milicias en Trípoli con armas y aviones; Turquía quiere prolongar el conflicto apoyando a Al Serraj y a sus las milicias aliadas (…), sabemos que Al Serraj no tiene derecho a firmar tales acuerdos, y nos mantenemos firmes con nuestros socios de la Unión Europea contra este acuerdo” dijo el canciller griego, Nikos Dendias, quien se reunió hoy en la ciudad libia de Bengazi, con el primer ministro del Ejecutivo paralelo local, Abdullah al Theni.
“El objetivo de Erdogan y Al Serraj es apoyar a las milicias terroristas para extender la vida de este Gobierno golpista”, declaró por su parte Al Theni, quien instó a la comunidad internacional a retirar su reconocimiento a este grupo, que autoproclama un Gobierno de Acuerdo Nacional que “se convirtió en un peligro para los libios y los países vecinos”.