El curador de la Bienal de Arte de San Pablo 2020, el italiano Jacopo Crivelli Visconti, está de visita en Buenos Aires para tomar contacto con la escena artística local y dio una conferencia en el Palacio San Martín para adelantar detalles de la 34º edición “que enfatizará la creación de una multiplicidad de relaciones en constante transformación”.
En junio pasado, el curador radicado en Brasil había adelantado a Télam que la próxima edición de la segunda bienal más antigua del mundo “estará centrada en la idea de que es necesario abandonar los puntos de vista monolíticos para abrirse a la multiplicidad de relaciones”.
“La bienal está pensada a partir de cómo estamos viviendo, y cómo el arte responde a eso”, dijo quien también fue el curador del envío nacional de Chipre a la Bienal de Venecia, sobre el proyecto que apunta a “ofrecer alternativas al brutal antagonismo que ha venido caracterizando el escenario político y social en los últimos tiempos”.
– Télam: La próxima edición de la Bienal de San Pablo, que por primera vez se extiende a diferentes espacios de la ciudad en simultáneo, es un modelo que en Buenos Aires conocemos por Bienalsur, y también por la primera edición de la Bienal de Oslo, Noruega, que se lanzó en mayo de este año con un programa de arte en el espacio público. ¿Cree que caducó el concepto que conocemos de bienal? ¿Eso demostrará San Pablo 2020?
– Jacopo Crivelli Visconti: No tengo la ambición de estar inventando algo totalmente nuevo, ni tampoco me preocupa, pero me parece que hay una particularidad en nuestro proyecto: varias bienales ocupan espacios diferentes pero lo que pasa generalmente es que se ocupan los espacios desde un punto de vista físico. El desafío de esta bienal es que las exposiciones de todas estas instituciones son parte de su programación y al mismo tiempo son parte de la bienal. Es también un ejercicio de diálogo institucional.