Hace días que las principales fuerzas políticas del país habían reconocido que no lograron llegar a un acuerdo para formar una coalición mayoritaria en el parlamento y poder asumir el gobierno; sin embargo, la expectativa hoy era que la Knesset (congreso) logre aprobar una ley que fije la fecha de las próximas elecciones para el 2 de marzo.
El atomizado parlamento israelí llegó a aprobar el proyecto de ley en una primera votación, pero no pudo concretar las dos votaciones siguientes, necesarias para enviar al gobierno en funciones de Benjamin Netanyahu para su promulgación, antes de la medianoche local, cuando vencía el plazo legal, informó el medio local The Jerusalem Post.
Se trata de la segunda vez que las principales fuerzas políticas del país no logran formar gobierno después de unas elecciones que no dieron mayoría clara ni al partido de Netanyahu ni a la alianza encabezada por el ex jefe del ejército, Benny Gantz.
En este contexto de profundización de la crisis política, al que se suma la reciente imputación por corrupción de Netanyahu, el oficialismo anunció hoy que irá a elecciones internas el próximo jueves 26, informó la agencia de noticias EFE.
“Las primarias del Likud se llevarán a cabo probablemente el 26 de diciembre, sujetas a su viabilidad logística”, informó una vocera de la organización, después de que el domingo pasado cancelaran las primarias en medio de las negociaciones para desbloquear la situación política.
Si uno de sus miembros consigue desbancar a Netanyahu, será él encargado de liderar la lista de legisladores en la próxima elección y, de ganar, convertirse en el futuro primer ministro.
Dado que el parlamento no logró aprobar una ley que establezca el cronograma y las condiciones legales hasta las próximas elecciones, estas tareas recaerán en el presidente de la nación y el gobierno en funciones. Los comicios deberán realizarse en algún momento en el mes de marzo.
Una encuesta publicada anoche por el Canal 13 de noticias, pronosticó que en una tercera elección en marzo de 2020, el Likud liderado por Netanyahu podría obtener solo 33 escaños y quedar ligeramente por debajo de la coalición Azul y Blanco de Gantz, que se llevaría 37 diputados.
De confirmarse estas cifras, Gantz igual debería buscar aliados para formar gobierno, algo que en estas últimas semanas no logró.