El abogado ultraconservador Kaïes Said y el empresario preso Nabil Karoui competirán en balotaje por la presidencia de Túnez tras haber sido los dos candidatos más votados en la primera vuelta de hoy, según encuestas a boca de urna.
Said, un independiente que defiende la pena de muerte y repudia la homosexualidad, que atribuye a una conspiración extranjera, obtuvo 19,5% de los votos, de acuerdo con los sondeos.
En segundo lugar, con 15%, se ubicó Karoui, magnate de los medios que está en prisión preventiva por presunta corrupción y antiguamente fue colaborador del partido gobernante Nida Tunis.
Las elecciones, que se adelantaron debido a la muerte repentina del presidente Beyi Caïd Essebsi en julio pasado, definirán si Túnez completa la frágil transición democrática que comenzó con la Primavera Árabe y el derrocamiento de Zine El Abidine Ben Alí.