“La reacción a la desobediencia civil ha tenido una respuesta que ha superado el 90 %”, aseguró Mohamed Ziauddin, el vocero de la coalición opositora Fuerzas de Consenso Nacional, dominado por la central que nuclea a los gremios profesionales, en diálogo con la agencia de noticias EFE.
“La oposición continuará con la desobediencia y la huelga hasta que la junta militar se rinda y entregue el poder a los civiles, esa es la única manera de que finalice”, agregó el líder opositor, que describió a la capital, Jartum, y a las principales urbes del país como “ciudades fantasmas”.
El 19 de diciembre pasado, en medio de un creciente malestar por el aumento del precio del pan y del costo de vida en general, una serie de protestas comenzó a crecer y multiplicarse en las principales ciudades del país.