La primera ministra británica, Theresa May, expresó su preocupación por la creciente polarización en el país en relación con el Brexit y urgió a sus pares a mantener la unidad para enfrentar la intrincada salida de la Unión Europea (UE).
“Tenemos razones para estar seriamente preocupados, tanto en casa como a nivel internacional, en la sustancia y en el tono”, alertó May en el que posiblemente haya sido su último gran discurso antes de ser sucedida por Boris Johnson o Jeremy Hunt al frente del Partido Conservador y, por ende, al mando del Gobierno.
La líder conservadora, quien se vio obligada a anunciar su dimisión después de que el Parlamento tumbara por tercera ocasión el acuerdo de salida al que había llegado con Bruselas, insistió en su intervención en la necesidad de “estar preparados para llegar a compromisos”.