
“Le dije al juez que a mi abuela, antes de matarla, la violaron”, afirmó Bartolomea Riera Alomar, alias Tolita, en declaraciones a Télam tras testificar en un juzgado de Palma de Mallorca sobre la muerte de su abuela y su abuelo por fuerzas nacionalistas en 1936, en plena Guerra Civil Española.
Más de ocho décadas después de los crímenes de Margalida Jaume y su marido Antoni Alomar, en 1936 en la isla mallorquina de Manacor, esta persistente mujer de 69 años, y su tía nonagenaria, Francisca Alomar Jaume, hija de las víctimas, pudieron contar por primera vez a un juez español el calvario de sus familiares, asesinados por los falangistas.
“Se trata de un caso emblemático porque Margalida estaba embarazada y hay testimonios de que fue víctima de abuso sexual”, explicó Aintzane Márquez, abogada de Women’s Link, una de las impulsoras de esta querella.