
“Hemos comenzado a lanzar ataques aéreos contra sitios operados por la milicia hutí, incluso en Sanaá”, la capital de Yemen, señaló un funcionario de la coalición bajo anonimato, usando el nombre de los rebeldes yemeníes.
El Ministerio de Defensa saudita advirtió que el ataque del martes contra el oleoducto en el reino podían “estrangular” los esfuerzos por poner fin a la guerra, que ha dejado miles de muertos y que la ONU define como la mayor catástrofe humanitaria actual.
La coalición realizó 11 ataques contra la capital sobre 19 en todo el territorio controlado por los rebeldes, informó la televisión de los hutíes Al-Masirah.
En la capital, los bombardeos dejaron seis muertos, cuatro de ellos niños, miembros de una misma familia que se encontraban en su residencia en el barrio de Al Raqqas, según un comunicado del Ministerio de Salud hutí citado por la cadena CNN.