
Según la requisitoria para el procesamiento del sospechoso, apodado “El Cachila”, el fiscal Jorge Vaz explicó que “surge en forma más que contundente, de acuerdo a su relato (en la indagatoria), que estuvo presente antes, durante y después del homicidio”.
Además, el fiscal sostuvo que, de acuerdo a los datos obtenidos en la investigación, el acusado y su o sus cómplices obligaron a la víctima a salir de la playa con dirección a la zona boscosa detrás de los médanos, “probablemente con un móvil sexual”.
El hombre apresado tras ser indagado por el fiscal Vaz admitió que se cruzó con la víctima en la playa el 28 de diciembre del 2014 y le ofreció “una estampita”, pero que luego ella se sintió “mareada” y que al auxiliarla descubrió que “no tenía pulso”, se asustó y se fue.
“Me peché con ella. Ella venía por la playa caminando, yo iba para Valizas y ella iba para el otro lado. Yo venía de Aguas Dulces”, declaró el acusado, quien detalló que Lola “venía caminando normal, con la mochila. Tenía un short y una blusita fina” y que le ofreció “una estampita”.
Vaz remarcó que uno de los puntos “más impactantes” del relato del acusado fue cuando dijo que la chica comenzó a sentirse mal y él la llevó hasta el bosque detrás de los médanos donde se sentaron bajo la sombra de un árbol: “Yo le pregunté qué tenía y me dijo que se sentía mareada. Ahí se sentó y cayó de rodillas”.
Fuente: http://www.telam.com.ar/notas/201905/360072-lola-femicidio-uruguay.html