El papa Francisco homenajeó este martes a la madre Teresa de Calcuta en Skopie, la capital de Macedonia del Norte y ciudad natal de la santa, desde donde llamó a los fieles a estar atentos para escuchar el “grito de los pobres”.
Recién llegado al país luego de pasar dos días en Bulgaria, Francisco quiso visitar el santuario dedicado a la Madre Teresa, construido sobre la Iglesia del Sagrado Corazón de Jesús, donde la santa fue bautizada en 1910, y que en 1963 fue destruida por un terremoto.
El pontífice fue recibido por las Misioneras de la Caridad, congregación fundada por la Madre Teresa, y depositó flores y rezó ante la estatua de la religiosa de etnia albanesa, informó la agencia de noticias EFE.