
Millones de ciudadanos de los 28 países de la Unión Europea (UE) votarán entre mañana y el domingo a los integrantes del Parlamento Europeo, la única institución del bloque elegida directamente, en un clima de alarma alimentado por el Brexit y el ascenso de partidos nacionalistas y euroescépticos.
Líderes europeos del establishment político temen que un avance importante de los euroescépticos en el Parlamento Europeo, que vota las leyes comunitarias, fija el presupuesto de la UE y supervisa a varias de las instituciones del bloque, dificulte la toma de decisiones en Bruselas.
Con sondeos que predicen un buen desempeño de fuerzas populistas de derecha y nacionalistas opuestas a una mayor integración, el presidente francés, Emmanuel Macron, advirtió esta semana que estos comicios serán los más importantes desde los primeros de 1979 y que la UE enfrenta una “amenaza existencial”.